martes, 1 de mayo de 2012

EN TIERRA DE GUITARREROS

Entre el 20 y el 21 de abril se realizó la 1° edición del “CANTA CUYO EN LA CALLE ANGOSTA” y allí estuvimos cantando el sábado 21, rodeados de leyendas del folklore cuyano…
Martin Giunchetti, Payo Silva, José y Mariano Peluffo y Guillermo Madero h, entre Alfonso Y Zavala.
Fueron sólo veniticuatro horas pero bastaron para llevarnos “una carretillada” (como decía el querido Alvaro Istueta) de amigos que nos brindaron su afecto y hospitalidad, en esas intensas y emocionantes horas en la tierra de guitarreros, Villa Mercedes, San Luís. Viajamos invitados por Osvaldo Bianchi -hijo de Rodolfo Bianchi, que continúa desandando la huella que dejara “El Maestro”- miembro de la comisión organizadora del “Canta Cuyo” que preside Marcelo Sciaglia y otros referentes. Hasta la casa de Osvaldo llegamos, pasado el mediodía del sábado y, a pesar de estar ya en la sobremesa, ésto no impidió que recibiéramos empanadas, asado y vino. Una excelente bienvenida después de unas ocho horas de viaje. En el lugar estaban: Viviana Castro, Silvia Zavala, Pablo Budini (Bosion Trio) y los integrantes del dúo Raíces Nuevas, entre otros amigos. En el lugar -además de guitarrear un rato- pudimos saber que la noche anterior había sido todo un éxito, con miles de espectadores que ovacionaron, en una cálida noche, a Las 100 guitarras Mercedinas, Jorge Viñas, Ernesto Villavicencio h, Los Trovadores de Cuyo, Los caballeros de la Guitarra y Los Cantores de Quilla Huasi. Con Carlos Lastra -a quien se le hizo un merecido homenaje- pude hablar por teléfono, pero ya no estaba en Villa Mercedes…lamentablemente no nos cruzamos. Igualmente le transmití el honor que era para nosotros estar en la misma fiesta donde había estado él, junto a “Los Quilla”, la noche anterior. Ya en el hotel, después de descansar un rato y ensayar los temas que íbamos a interpretar, pudimos llegar al anfiteatro de la Calle Angosta, donde se desarrollaba el segundo día de la 1° edición del “Canta Cuyo”. Los primeros fríos del año comenzaron esa noche, por lo que la cantidad de espectadores con respecto a la noche anterior fue menor. Igualmente, en primera fila, se encontraban el Gobernador de la Provincia, el Intendente y el Obispo y público de distintos lugares de Cuyo que se acercó y no huyó de la fresca noche gracias a los ponchos – y quizás algún traguito- que no lo dejaron aflojar. Y así se logró que la noche fuera cálida, fundamentalmente, por el sentimiento de la gente. En la previa fue donde pudimos darnos el gusto de sentirnos parte de ese pedazo importante de nuestro folklore y gracias a los ensayos previos, las charlas, los abrazos y los reencuentros, pudimos conocer en vivo y en directo a verdaderas leyendas, como “El Pulpo” Félix María, el dúo Oyarzabal- Navarro, Enrique Espinosa y Los Indios Tacunau.
Un capítulo aparte merece nuestro querido Ricardo Aparicio Silva, quien fuera el verdadero invitado de la noche. Ya en la previa nos presentaban como “El Payo Silva y su conjunto” y está bien que así sea. El Payo es parte de esta “casta” de músicos que dieron nombre y brillo a lo cuyano y nosotros -como conjunto- intentamos que él pueda volver a sentir algo de ese orgullo que lo hizo grande, interpretando los temas con gran respeto, dedicación y cariño. Por supuesto que la calidad de José y Mariano Peluffo en guitarras, hace que todo sea realmente mucho más fácil. Y fueron muchas las veces que lo vi emocionarse al Payito, al ser saludado por distintas personas del público que se le acercaban -también con lagrimas en los ojos- como por ejemplo, la hija “del Correcto”, a quien Alfonso y Zavala le dedicaran su famoso gato. No pocos preguntaban si realmente era “El Payo Silva” el que estaba en el lugar. Ya arriba del escenario, tuvimos una muy grata sorpresa al ver que “saltaran” los sobrinos de Julio Arce, para pagarnos el cogollo que le dedicáramos a su tío, en la tonada “De vuelta al pago”. Justamente, esa tonada termina con una estrofa que resume lo que sentimos al estar en esta tierra de guitarreros y lo digo -sin dudarlo- en nombre del Payo, de José, de Mariano y de Martín, porque estamos unidos en el mismo sentimiento: “cantores y guitarreros de este pago, que es historia, entreverarme con ellos…para qué quiero más gloria?”. Si Dios quiere, estaremos nuevamente por esos pagos mercedinos en febrero del próximo año, cuando se realice la 2° edición del “Canta Cuyo” y la magia vuelva a pasar por esa tierra de guitarras y guitarreros. Guillermo M.